‘En Jesús vemos a Dios escondido en todo ser humano…’
Me he preguntado muchas veces: ¿por qué nos cuesta tanto o qué nos impide ver a Dios en los otros?
De repente entendí, que mientras no hayamos encontrado a Dios en nuestro propio corazón, es muy difícil reconocerlo en el otro…
Queridos Amigos y Compañeros de Trabajo de las Fundaciones Cristo Vive Chile, Laboral y Naciente:
Mirando por mi ventana en la Población Quinta Bella veo como maduran los damascos de los árboles que plantamos hace 30 años en las veredas con la ayuda solidaria de nuestros amigos alemanes. Estos frutos sabrosos y abundantes son como un regalo de navidad para los pobladores y para mí son un símbolo del amor, que se multiplica al compartirlo.
En las Fundaciones CRISTO VIVE Chile, Bolivia, Perú y NACIENTE buscamos durante todo el año trabajar con amor en todos nuestros Servicios para que las personas más necesitadas y vulnerables puedan sentir un poco el amor de Dios y descubrir el misterio de la Noche Buena: la encarnación de Dios en Jesús nos revela que todos nosotros somos hermanos – todos hijos iguales de Dios, con la misma dignidad.
¡Cuánto deseo que ese mensaje llegue a los corazones de todos los seres humanos, mientras intento entregarlo a través de mi palabra y vida!
Las graduaciones en nuestros Jardines Infantiles y en nuestras Escuelas siempre son una gran fiesta para los niños y sus padres, para los jóvenes pobladores y sus familiares cuando obtienen sus certificados. Con alegría las Educadoras en los Jardines y los Instructores y Formadores en las Escuelas de Oficios, reciben al gran número de familiares y amigos invitados por ellos. Siempre me sorprenden, como escuchan cuando les hablo de los grandes sueños y potencialidades, que Dios ha puesto en sus corazones. Y les desafío que los realicen en sus vidas. En ese momento, muchas veces, me dan un gran aplauso. Pero cuando miro a sus ojos veo, cuán difícil es para ellos creer en eso. Muchos de ellos han sufrido humillación y marginación que dejaron heridas profundas. Por esto junto a nuestros equipos seguiremos luchando para que este mensaje les toque. ¿Quizás nos cuesta también a nosotros creer en la luz de Dios en nosotros y en su amor incondicional a cada uno de nosotros?
Nuestros servicios han crecido en los tres países y seguirán creciendo.
Es nuestro sueño en Chile, que la Formación Profesional en Oficios se instale en la estructura educacional del MINEDUC por ley y conceda a los alumnos egresados un título profesional en el oficio. Nos meteremos a esta aventura, ya que “los jóvenes pobladores no pueden esperar”, es preciso que reciban una buena formación profesional para conseguir un trabajo bien remunerado.
Liderados por nuestro Director Ejecutivo y Vicepresidente Dr. Ignacio Rosselot y apoyados por Andrés Ossandón y Claudia Fuchslochner estamos concluyendo un proceso de Planificación Estratégica de las Fundaciones CRISTO VIVE para los próximos años con la participación de muchos de nuestras Compañeras y Compañeros de Servicios, siempre iluminados por la Misión y Visión que, en su momento, definimos juntos. Cada Director de Servicio se siente empoderado/a en su responsabilidad, conoce y maneja su presupuesto y trabaja en equipo cumpliendo la misión encargada; con esto llegamos a ser más 500 compañeros de servicio entre contratados y voluntarios.
A veces nos toca vivir situaciones especiales. Para poder sostenernos en nuestro servicio necesitamos estos pequeños milagros o signos de Dios. Él sabe que sin estas muestras de Su Amor no seríamos capaces de resistir los momentos de impotencia ante el sufrimiento humano que nos toca vivir. Siempre me admiro cómo suceden. En la tarde de un domingo Maruja sentía el impulso de ir a ver cómo estaba el guardia del Jardín Naciente. Partió. Antes de llegar vio a un hombre con un carrito recoger cosas útiles de la basura de la población (cartones, botellas y otras). Se acercó para saludarlo y le preguntó si necesitaba algo concreto. Él contestó “no, pero quizás sí”, mostrando discretamente a sus pies desgastados con ojotas. Maruja lo invitó a acompañarla al Jardín, ya que se acordó que en la semana alguien había traído un saco de ropa y, ¿quién sabe?, zapatos. Se abrió el saco y apareció primero un par de zapatos de hombre casi nuevos e increíble, le calzaron a este hermano como a medida.
Hace un tiempo atrás Carol, nuestra secretaria, contó en nuestra reunión de equipo de Administración, que tuvo una de esas experiencias especiales. La Hermana Teresa buscó ayuda para 5 familias que en un incendio en la población habían perdido todas sus pertenencias. Había abundante ropa e incluso muebles en las bodegas de la Fundación, pero lo que nos faltaba eran colchones. Las dos quedaron tristes después de finalizar la búsqueda. Al volver Carol a su escritorio recibió la llamada de una fábrica. Preguntaban si la Fundación recibía donaciones en especies, ellos tenían 9 colchones nuevos que ya no podían vender porque las fundas plásticas se habían dañado ¡Era exactamente el número de colchones que faltaba! Carol casi no pudo creerlo, pero tenía el sentimiento que esto era un milagro. ¡Qué felicidad para las familias afectadas! Mientras ella nos hablaba trataba de secar discretamente las lágrimas de sus ojos.
Muchas veces nos sorprende un apoyo solidario, que recibimos de nuestros Amigos donantes de Europa, justamente cuando tenemos problemas financieros, como los vivimos el año pasado, cuando habíamos tomado la decisión de no despedir ningún Compañero por las restricciones de la Pandemia y el Sence no pagó los cursos paralizados.
Así vivo personalmente la mano invisible de Dios en nuestro servicio a nuestro pueblo, siempre con la confianza, que todos juntos aportemos a la dignidad de todas las personas, que atendemos y así logremos una cultura de amor en nuestro país.
Unidos en este gran sueño les abraza.
Karoline