CMI se reúne con las iglesias de Ucrania en Kiev
La delegación del CMI se reunió con altos dirigentes de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana y de la Iglesia Ortodoxa de Ucrania.
La delegación del CMI estuvo compuesta por el obispo Dr. Heinrich Bedford-Strohm, moderador del Comité Central del CMI; Su Excelencia el arzobispo Dr. Vicken Aykazian, vicemoderador del Comité Central del CMI; y el Rev. Prof. Dr. Jerry Pillay, secretario general del CMI. Asimismo, acompañaron a la delegación el director de la Comisión de las Iglesias para Asuntos Internacionales del CMI, el señor Peter Prove, y el director de relaciones ecuménicas y encargado de programa de la Comisión de Fe y Constitución, el Prof. Dr. Vasile-Octavian Mihoc.
La delegación del CMI se reunió con altos dirigentes de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana y de la Iglesia Ortodoxa de Ucrania, dos iglesias cuya larga disputa se ha intensificado desde la invasión rusa. La Iglesia Ortodoxa Ucraniana declaró su independencia del Patriarcado de Moscú, al que antes estaba afiliada, mientras que la Iglesia Ortodoxa de Ucrania —a la cual el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla ha concedido la autocefalia— ha solicitado la adhesión al CMI. La delegación confirmó la disposición del CMI para organizar encuentros entre ambas iglesias para resolver sus desavenencias.
Tanto el metropolitano Antonio, canciller de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, como el metropolitano Epifanio, primado de la Iglesia Ortodoxa de Ucrania, han dado muestras claras de su voluntad de diálogo. Esta apertura al diálogo brinda una señal de esperanza en la sanación de una de las numerosas heridas y divisiones que este trágico conflicto ha profundizado.
Las iglesias están llamadas a desempeñar un importante papel en la sanación de esas heridas, en el cese de esta guerra ilegal e inmoral, y en la promoción de una paz justa para los pueblos de Ucrania, de la región y del mundo. Se hizo hincapié en el mismo mensaje en las reuniones celebradas con los miembros del Consejo de Iglesias y Organizaciones Religiosas de Ucrania (UCCRO, por sus siglas en inglés) y con el Ministerio de Cultura y Política de la Información, el señor Oleksandr Tkachenko.
El itinerario de la delegación del CMI incluyó una visita al Monasterio de las Cuevas de la Santa Dormición de Kiev, uno de los lugares más sagrados del cristianismo ortodoxo en la región y fuera de ella, que se ha convertido en un foco de las tensiones entre la Iglesia Ortodoxa Ucraniana y la Iglesia Ortodoxa de Ucrania, así como de la preocupación por las libertades y los derechos religiosos, debido a las medidas adoptadas por el gobierno para expulsar del monasterio a la comunidad monástica de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana y sus instituciones. Al final de su visita al monasterio, los delegados del CMI fueron invitados a saludar a los fieles que oraban en la entrada.
El pueblo ucraniano necesita unión, no división, especialmente en estos tiempos de guerra en que Ucrania se enfrenta a la invasión de su territorio por parte de las fuerzas rusas. La armonía entre las comunidades religiosas de Ucrania es un factor esencial de la unidad nacional que se requiere en esta crisis. El CMI espera trabajar con las iglesias y con el Gobierno de Ucrania para fomentar esa unidad y reducir las divisiones y la desunión entre los fieles.
En ese contexto, el secretario general del CMI, el Rev. Pillay, expresó su agradecimiento por el acuerdo de principio sugerido por los representantes de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana y de la Iglesia Ortodoxa de Ucrania, con quienes la delegación del CMI se reunió para planificar una serie de mesas de diálogo que serán organizadas por el Consejo. En los próximos meses, el CMI trabajará para acoger la primera de esas mesas de diálogo a finales de este año.
Consejo Mundial de Iglesias – Ginebra