Sí al camino Sinodal alemán
El Comité Central de los Católicos Alemanes es una institución formada por laicos y laicas de larga historia y con gran peso en la Iglesia alemana.
Juntamente con los obispos emprendieron en el año 2020 una serie de reuniones con el título general de “Camino sinodal alemán”, una asamblea formada por 230 personas entre laicos, obispos y representantes de órdenes o congregaciones.
La asamblea se ha reunido en cinco ocasiones desde enero de 2020 hasta marzo de 2023, elaborando diferentes documentos en los que se demanda a Roma, entre otras cosas:
- La ordenación de mujeres;
- Que los laicos tengan más peso en las decisiones de los obispos, incluyendo su elección;
- La reforma de la moral sexual de la Iglesia;
- El reconocimiento de las parejas homosexuales;
- La eliminación del celibato sacerdotal.
Sin duda, no todos los obispos han estado de acuerdo con esas demandas y los medios conservadores han denunciado prácticas de acoso y chantaje a los disidentes, pero en todo caso el Vaticano ha reaccionado en contra, se han producido situaciones de tensión y se ha hablado incluso de cisma.
En estos momentos -ya redactándose los borradores- se va a celebrar, antes del verano, una reunión de representantes alemanes y del Vaticano.
Dicho todo esto, me atrevería a esbozar un pequeño comentario personal. De entrada, no se puede sino estar de acuerdo con las demandas antedichas, aunque algunas no dejan de tener sus dificultades. Está claro que la moral sexual católica debe cambiar, pero ¿de qué manera? ¿es posible y sensato declarar que lo que ayer era pecado hoy ya no lo es? ¿o más bien se trata de ir haciendo gestos que lleven a una aceptación social de lo que antes era nefando?
Y en cuanto a la intervención de los laicos en el nombramiento de los obispos ¿es seguro que eso ha de nombrar a personas más sensatas, más religiosas y más comprometidas? ¿qué votaría esa mayoría de católicos conservadores, los mismos que han votado por las ultraderechas en Europa?
Carlos Barberá / Alandar – Madrid