La Argentina de Javier Milei

Milei asumirá el cargo el 10 de diciembre, día en que vence el mandato del actual presidente, el peronista Alberto Fernández. Ese día anunciará los nombres de su equipo de gobierno, entre los que seguramente el más esperado es el del Ministro de Economía. 

De hecho, durante la campaña electoral Milei, que se define como anarcocapitalista, se comprometió a recortar el gasto público en un 15%, abolir el banco central argentino, abandonar el peso y hacer del dólar estadounidense la moneda legal de Argentina. Propuestas que difícilmente podrá mantener, teniendo en cuenta que su partido controla sólo una cuarta parte de los escaños en cada cámara, lo que le obligará a formar alianzas para avanzar en la agenda legislativa. Además, advierten los economistas, la dolarización de una economía tan grande y comunicada con tanta antelación podría hacer subir la inflación. 

Buenos Aires ya atraviesa una crisis de reservas de divisas porque el peso se ha debilitado mucho y se espera una nueva devaluación antes de que Milei asuma el cargo. En una situación similar, el nuevo presidente “necesitará imprimir aún más pesos para iniciar el proceso de dolarización, con el riesgo de desencadenar otro ciclo de hiperinflación, erosionando rápidamente su popularidad política”, observa Ian Bremmer, según quien, con la victoria de Milei,

Numerosas incógnitas afrontan el nuevo gobierno y el país. Pero el shock que el líder de La Libertad había prometido darle al sistema político argentino ya está en marcha. El domingo comenzó con el declive del kirchnerismo, la corriente del peronismo que domina la política argentina desde 2003. Mañana se abre un nuevo capítulo.

“Con la elección de Javier Milei como presidente, los argentinos han optado por romper con la política económica peronista. Aunque no todas las propuestas se implementarán completamente (dolarización, reducción drástica del gasto público y de los impuestos, privatizaciones), la dirección que el presidente electo Milei pretende dar a Argentina es clara: minimizar el papel del Estado en la gestión de la economía, para dejar mayor libertad a las fuerzas del mercado. La elección de Milei también tendrá efectos geopolíticos muy importantes: Argentina no entrará en los BRICS ampliados, probablemente abandonará la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China y pondrá en duda el Mercosur“.

Antonella Mori – ISPI América Latina