Noviembre 24, 2024

El arte de vivir y hacer crecer la vida

 El arte de vivir y hacer crecer la vida

Hoy, día mundial del medio ambiente, queremos proponer este encuentro fraterno para sentir y valorar que desde la Patagonia tenemos un grado notable de responsabilidad en el cuidado de la Casa Común.

Agradezco la valiosa presencia de cada uno de ustedes, distinguidas autoridades y amigas y amigos todos, para que este breve momento de reflexión y oración nos ayude a orientar una acción más audaz e incisiva en nuestros estilos de vida y en nuestras responsabilidades sociales y políticas, para un compromiso común en construir un medio ambiente en belleza y armonía.

Con sencillez pedagógica, el autor bíblico del libro del Génesis que hemos leído, nos indica que la mano creadora de Dios fue haciendo que los varios elementos de la Creación, de la nada y del caos, llegaran a ser COSMOS, una variedad de creaturas en perfecta armonía y belleza.

Si alguien ha ido al Parque Patagonia, en la entrada del pequeño cementerio donde está sepultado también Douglas Tompkins, hay un letrero que él puso y que dice: “No hay sinónimo para DIOS más perfecto que la BELLEZA”.

Sí, armonía y belleza, de la que el ser humano somos parte fundamental, y a la vez tenemos la gran responsabilidad de CULTIVAR Y DE CUIDAR, con sabiduría, amor y creatividad. Es el ARTE de VIVIR y HACER CRECER LA VIDA, de cada creatura.

A su vez reconocemos que NO SOMOS DUEÑOS de las creaturas. Dios es el Creador, nosotros somos sus cuidadores. Dios no excluye a nadie de los bienes que nos regala día a día, con amor y generosidad, sobre todo en nuestra Patagonia, para todos. Por eso decimos que son BIENES COMUNES, NO SON RECURSOS.

Estos principios éticos, espirituales y profundamente humanos, vemos que desde hace años son gravemente amenazados.

Una de las evidencias más notables de que estamos en una nueva época de la Humanidad es la CRISIS AMBIENTAL, en que nosotros, los seres humanos, deterioramos, depredamos y aniquilamos los bienes que la hermana madre Tierra nos regala abundantemente para todos.

La madre Tierra, sin los seres humanos puede vivir fecunda y armónicamente.

Los seres humanos, sin la madre Tierra y todos sus elementos (tierra, agua, aire, alimentos, energía, animales, plantas, …) no podemos vivir.

Sin embargo, de manera irresponsable e inmoral, los seres humanos ponemos en grave peligro nuestra misma vida, al destruir los bienes de la Creación, a un ritmo más acelerado de lo que el proceso natural de la Creación puede dar.

Entonces percibimos claramente que la crisis ambiental tiene su origen en una CRISIS DE CIVILIZACIÓN, que sangra en crisis ÉTICAS, SOCIALES, POLÍTICAS, ECONÓMICAS, ENERGÉTICAS, CULTURALES, RELIGIOSAS, EDUCATIVAS, MORALES, JURÍDICAS, TECNOLÓGICAS, COMUNICACIONALES, CIENTÍFICAS, etc.

Y como “TODO ESTÁ CONECTADO”, la crisis ambiental y la crisis humana, son UNA SOLA CRISIS, de la cual “nadie se salva sólo”.

Hace hoy 8 años, en su encíclica “Laudato Sí”, el Papa Francisco nos iluminaba con absoluta claridad, profundidad y valentía en estas problemáticas.

Y hace 15 años, como Iglesia de Aysén, ofrecimos la Carta Pastoral “Danos hoy el agua de cada día”, para entender mejor el mundo global en que vivimos y lo que significa vivir y luchar hoy en la Patagonia, frente a los nuevos colonialismos del poder económico y político mundial, que quiere conquistar los bienes de la Creación, sobre todo los más esenciales para la vida de todo ser vivo (como la hermana AGUA), y manipular y hasta comprar conciencias de nuestra gente con falsos principios e insistentes propagandas.

Este día mundial del medio ambiente, instituido por la ONU el 15 de diciembre de 1972 y celebrado por primera vez en 1973, HACE 50 AÑOS, la ONU escogió para este año el tema: “DERROTA LA CONTAMINACIÓN DEL PLÁSTICO”. En todo el mundo, CADA MINUTO, compramos UN MILLÓN DE BOTELLAS PLÁSTICAS. Nuestro planeta se está ahogando por culpa del plástico, nos dice la ONU. Lo hay en el Polo Norte, en la Antártida, en el Éverest, en los ríos y lagos, en los Océanos; calculan que hoy, en los Océanos, hay más de 100 millones de toneladas de plásticos. Consideremos que el plástico demora 450 años para descomponerse. ¡¡¡Es una MASACRE a la naturaleza!!!

Pero en este día mundial del medio ambiente, quisiera llamar la atención sobre UN SOLO problema que considero un VIRUS MALIGNO que va carcomiendo peligrosamente el corazón humano, va depredando peligrosamente los bienes de la Creación y va amenazando muy peligrosamente la PAZ SOCIAL, mundial.  Me refiero al CONSUMISMO.

Pensando sólo en los alimentos, no podemos desconocer que hoy, en el mundo, se producen alimentos para 12 mil millones de personas. En el Planeta somos alrededor de 8 mil millones.

Por un lado, millones de personas mueren cada día por falta de alimentos, falta de agua, falta de solidaridad. Por otro lado, algunos millones más gozan de sobreabundancia de alimentos, llegando incluso al vergonzoso e inmoral escándalo de botar, desechar, tirar a la basura el 38% de los alimentos que se producen (fuente: Carlo Petrini), creando además el cada vez más preocupante problema de la basura.

Pero el consumismo hace que nunca quedemos contentos con lo que tenemos, y siempre elevemos los deseos para crearnos la necesidad de tener cada vez más y más cosas, quizás para sentir que necesitamos llenar los vacíos de nuestro SER (tener, versus SER).

En este día del medio ambiente ojalá sea un día de CONVERSIÓN ECOLÓGICA. Un día para plantearnos NUEVOS ESTILOS DE VIDA, para revisar nuestro uso del agua, de la energía, del plástico, de los alimentos, de los vestidos, etc.

Y a su vez, plantearnos la calidad y la calidez de nuestra SOLIDARIDAD con los más pobres, los empobrecidos por nuestro egoísmo, por nuestro individualismo, por nuestra arrogancia, por nuestro consumismo.

Como Iglesia de Aysén, este año seguiremos profundizando en estos temas sensibles para la dignidad humana y ambiental, sobre todo en la ya tradicional SEMANA SOCIAL, que realizaremos en el mes de agosto, mes de la solidaridad, en coincidencia con la fiesta de San Alberto Hurtado, en que reflexionaremos sobre la Carta Pastoral “Danos hoy el agua de cada día” (que les entregaremos luego), a los 15 años de su publicación, y también el 1 de septiembre, “DÍA DE LA CREACIÓN”, como fue propuesto en la misma Carta Pastoral y reafirmado años después por el Papa Francisco en la encíclica “Laudato Sí”.

Concluiremos hoy nuestra celebración replantando en el frontis de nuestra catedral la “ARAUCARIA DE LA JUSTICIA Y LA PAZ”, como compromiso de embellecer la VIDA nuestra con gestos de AMOR.  

+ LUIS INFANTI DE LA MORA, osm

Obispo Vicario Apostólico de Aysén

Coyhaique, 05 de junio de 2023

Día Mundial del Medio Ambiente - Iglesia de Aysén 2023

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