El Papa no va a declarar al Tribunal Vaticano
Finalmente el Papa Francisco no será citado como testigo por la Corte del Vaticano, en el contexto del juicio por supuestas irregularidades financieras en el llamado ‘affaire Londres’ con directa participación de la Secretaría de Estado.
El testimonio del Papa había sido solicitado por varios abogados defensores de los diez acusados en el juicio. El Tribunal presidido por Giuseppe Pignatone – informó a los pocos periodistas admitidos en la Sala multifuncional de los Museos Vaticanos – que ordenó en cambio que, concurra el enigmático Secretario de Estado adjunto, Monseñor Edgar Peña Parra, y el hermano del cardenal Angelo Becciu, Antonino, mientras que la Corte vaticana se reservó el testimonio del cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, por estar relacionado a lo que dirá en la Corte el funcionario Peña Parra.
El Tribunal, con otro auto, rechazó las reiteradas y pertinentes solicitudes de la defensa de Angelo Becciu, que se habían alineado a las otras defensas, con el objetivo jurídico de borrar del proceso los 15 archivos de audio entregados por Francesca Chaouqui en la audiencia anterior, autograbados por Monseñor Alberto Perlasca, testigo clave en el juicio en curso.
Se recordó que en su momento el cardenal Becciu le reprochó al Papa haber recibido a Chaouqui y, rápidamente, Francisco le respondió pidiéndole perdón. ‘Lamento si este saludo pudo doler. Me han preguntado si la señora podía venir con sus hijos a la audiencia general para un besamanos y pensé; que venga’. Además, le dijo que ‘casi he olvidado la aventura de esta señora’, respondía el papa.
Al comienzo de la Audiencia número 44, el abogado Fabio Viglione, defensor de Becciu, había argumentado que se trataba de archivos de audio tomados fuera de las normas vigentes, ya que son fácilmente editables y manipulables. Finalmente, según establece una ordenanza específica del presidente Pignatone, no habrá discusión en la sala del Tribunal entre la ex asesora Francesca Chaouqui y Genoveffa Ciferri, esperado los movimientos jurídicos de las respectivas defensas.
Expertos en estos temas judiciales dentro del Estado Vaticano, indican que hubiera sido un escándalo mayor y fuera de toda norma que el Papa Francisco fuera a declarar en este espinudo tema. Sin embargo, se sospecha que no pocos altos funcionarios de la Curia vaticana siguen tramando nuevas operaciones secretas para seguir enlodando el quehacer del Cardenal Becciu durante su trabajo en la Secretaría de Estado.
Altos funcionarios y observadores especializados en estos complejos temas legales vaticanos se preguntan no sin razón: ¿Cuándo cesará este escándalo financiero con ribetes de odiosas intrigas y trampas por doquier que se perciben hasta en los pasillos de la Santa Sede?
Consejo de Redacción de revista ‘Reflexión y Liberación’
Madrid – Santiago – Roma