Embajador Julio César Caballero a la CAL
El Papa Francisco nombró como nuevo responsable de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL) a Julio César Caballero Moreno, que fue embajador de Bolivia en la Santa Sede desde 2016 y que mantenía un buen vínculo con el expresidente Evo Morales. Tras la salida de Morales del poder, Caballero fue reconfirmado como embajador en el Vaticano por la presidenta interina Jeanine Añez, pero igual dejó su cargo en marzo de 2020. Caballero tiene 51 años, es casado y con tres hijos.
De periodista a embajador
Caballero había señalado durante la ceremonia de posesión como nuevo embajador ante la Santa Sede en aquel momento que iba a ser su primera experiencia como servidor público ya que hasta ese día se había desempeñado como periodista. “Pondré mis mejores esfuerzos por mi patria, Dios bendiga a Bolivia”, expresó en aquel entonces.
También recordó que el expresidente de Bolivia Evo Morales lo había invitado a asumir el cargo de embajador en el Vaticano durante una entrevista en vivo en televisión luego de la muerte de su antecesor, Armando Loayza.
Es que Caballero dirigió programas de televisión por más de 30 años. Nació en Santa Cruz, es licenciado en Ciencias de la Comunicación y en Ciencias Jurídicas y Sociales, habla inglés, se desempeñó como periodista en diferentes medios de comunicación. Fue director Ejecutivo de la Escuela Internacional de Alta Gestión (EIAG) en 2012 y del Instituto Latinoamericano del Conocimiento (INLACON) en 2013. En 2015, fue vocero oficial de la visita del Papa Francisco a Bolivia, recordaba la Cancillería como reseña de su trayectoria profesional cuando fue nombrado embajador.
En favor de las regiones de América
La CAL es un organismo de la Curia Romana creado en 1958 que tiene como función primordial la de “aconsejar y ayudar a las Iglesias particulares en América Latina” y “estudiar las cuestiones que se refieren a la vida y progreso de dichas Iglesias, especialmente estando a disposición, tanto de los dicasterios de la Curia interesados por razón de su competencia, como de las mismas Iglesias para resolver dichas cuestiones”.
Corresponde a la CAL, a través de su presidente (actualmente el cardenal Marc Ouellet, quien también es Prefecto de la Congregación para los Obispos) , informar “regularmente al Sumo Pontífice sobre cada uno de los asuntos”, y sugerir y promover “las iniciativas o medidas de gobierno que considere convenientes u oportunas”.
Por último, se concluye que también es tarea primordial de la CAL favorecer “las relaciones entre las instituciones eclesiásticas internacionales y nacionales, que trabajan en favor de las regiones de América Latina y los Dicasterios de la Curia Romana”.
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